¿Cómo es un antes y después de 90 días de entrenamiento en un hombre de 45 años? John Masgalas compartió su experiencia para que tomemos consejos y copiemos sus mejores movimientos.
Antes y después: 90 días de entrenamiento: cómo comenzó
John Masgalas, de 45 años compartió con la revista Men’s Health los cambios y la transformación de su cuerpo.
Habiendo trabajado intensamente y teniendo algo de masa muscular comenzó a registrar su consumo de alimentos.
Comenzó a seguir a «The Gym Bro» un ciclista de las redes sociales y a cortar sus calorías en el verano. Sin embargo, no podía bajar de peso lo suficiente como para ver sus abdominales. No sabe si era por falta de motivación, o por algo que estaba haciendo mal. John se decidió este último invierno a comenzar a aumentar las cargas en el trabajo muscular.
Antes del Covid 19, cuando podía entrenar libremente.
Al poco tiempo de haber comenzado aumentar las cargas sintió que podía permitirse comer cualquier cosa que quisiera, su peso continuaba subiendo hasta que llegó a 208 libras. En 5 meses había ganado 20 libras.
En este punto las carreras de espartanos que John disfrutaba, habían sido canceladas por el Covid-19, y no tenía ningún objetivo para permanecer entrenando.
La crisis del Covid 19 nos obligó a cambiar la forma de entrenar
Comenzó a entrenar mientras trabajaba desde casa durante la cuarentena, con un estilo menos activo en general. Terminó con un terrible descenso de energía, aunque aún tenía potencia muscular en el gimnasio. Su sensación era de cansancio todo el día.
Antes y después, el día en que todo comenzó
Se encontraba observando un vídeo de Paul Revelia en el que el YouTuber mencionaba un desafío de 90 días de transformación corporal. Luego de haberlo discutido con su esposa y comentarle que esto le daría una fecha y un objetivo sólido para finalmente llegar a dónde quería llegar, John comenzó el desafío de 90 días de Paul Revelia.
¿En qué consiste el desafío de noventa días de Paul Revelia?
Para lograr sus objetivos corto sus calorías de 3.200kcal a 2400kcal al día, consumiendo 220 gramos de proteína, 55 g de grasa y 280 gramos de carbohidratos por día. Su objetivo era llegar a las 180 libras para lo cual planificó entrenamientos de cardio para generar un déficit calórico.
John compró una máquina de escalones para colocar debajo del escritorio, la cual usó 40 minutos cada mañana mientras trabajaba.
John tuvo que equiparse para poder seguir con su transformación en casa
Los gimnasios continuaban cerrados, y por lo tanto debió realizar todos los ejercicios necesarios desde su hogar. Por ello decidió comprar elementos para realizar sentadillas, una barra, un banco, mancuernas ajustables, y una barra para levantarse en la puerta. Sabía que este equipo le permitiría obtener todos los conceptos básicos necesarios para su transformación corporal
Antes y después: 90 días de entrenamiento
Su rutina de levantamiento consistía en un programa de cuatro días de tracción, empuje, piernas, núcleo y abdominales que duraba aproximadamente una hora en cada sesión. Al final del cuarto día repetía y no tomaba días de descanso «completo» (realizaba descansos activos).
Mantuvo sus levantamientos simples, utilizando movimientos compuestos básicos como press de banca, sentadillas, peso muerto y remos.
Mantuvo la intensidad alta y utilizó un rango de repeticiones de 8 a 12. Se aseguró de que la última serie de cada ejercicio fallara por completo y luego bajaba el peso y fallaba una vez más.
Antes y después: 90 días de entrenamiento
Una vez que comenzó la pérdida de pesó decidió darse de baja del plan del gimnasio, y agregó una rutina de 40 minutos caminando todas las tardes luego de cenar. Con esto mantuvo descenso de peso y en este punto su actividad fue intensa: entre dos sesiones de cardio y levantamiento de peso cada día. Estaba perdiendo aproximadamente 2 libras por semana.
Cada vez que el descenso de peso a paraba, bajaba sus calorías y mantenía las proteínas y las grasas en iguales proporciones, disminuyendo los carbohidratos hasta que eventualmente llegó a consumir 1700 calorías por día.
En este punto él había agregado un día libre cada 10 días, en el que comía alrededor de 3500 calorías y notaba que esto le hacía ganar entre 3 y 4 libras por unos días, y luego su peso bajaba rápidamente a una cantidad inferior a la anterior al día libre.
Para el final de este desafío había llegado a pesar 177 libras había perdido 31 libras y había sobrepasado su objetivo de peso.
Antes y después: 90 días de entrenamiento, un cambio por dentro y por fuera.
Cada vez que sentía que no estaba trabajando lo suficiente, se recordaba a sí mismo que alguien allá afuera se sentía de la misma manera que él, pero estaba trabajando mucho más intensamente que él en ese momento.
Tomó fotos de todo el proceso para monitorear sus resultados, ya que de vez en cuando sólo mirarse al espejo no funciona. Lo más importante para él fue haber tenido el apoyo de su esposa durante todo el proceso.